viernes, 12 de marzo de 2010

crimen es jazz

Nueva Orleans está grabada
de corazones y música lejana,
desde los disparos
que dejaste
la libertad anda suelta
por la escena del crimen
como animal contradictorio
soldada a tus zapatos azules
de Carl Perkins,
Y tu uniforme blanco inmaculado
organiza batidas
en busca de la última transgresión
de esta ciudad
que tiene los escaparates
más tristes de la Tierra
desde que
abriste fuego
contra tus entrañas.

Si no te hubieras marchado
dejándome dedicadas todas esas fotografías
con tu sonrisa de cordura transitoria,
seguiría pensando
que al doblar la esquina
aparecería tu espalda
de suicida reversible.

Ahora, siento otra vez
mis sábanas vaciarse de traumas
muertos que se resisten
a abrirse de piernas por amor
y otras tantas mentiras
ordenadas alfabéticamente
en el manual de instrucciones
de una señorita de provecho,
y ensayo frente al espejo
como cruzar y descruzar
las piernas
sin estridencia
para alcanzar la perdición
del pianista
antes de que finalice
la Jam con su lamento
Siento otra vez el vértigo
desde el asiento de atrás de un taxi
que baila sin horizonte
bajo un cielo drogado de tormentas
con los abrigos tirados
entre el break y el stomp
de nuestros cuerpos
y las manos buscando
el revólver por si
toca correr

Aquí, la vida se juega licencias
para rasgar con la aguja
el pasado de vinilo
desordenado,
como un sueño sucio
de sangre y de sombras
que quiere recordarte
con más pena que gloria.
Y tus manos manchadas de
pactos en blanco y negro
tejidos con las mías,
esperan abiertas
que cumpla la parte del trato,
que firmamos con frivolidad
antes del olor
a pólvora mojada
tatuara todas las paredes
de este hotel.

Desde que no estás,
las calles son hermosamente obscenas,
los músicos maúllan más alto que nunca,
farolas amarillas
juegan a la rayuela
sobre el asfalto humeante,
paraguas, sombreros,
abrigos largos,
habanos caros,
el olor a dinero
flirtea en las portales
con el perfume del sexo sin amor
… me recuerda tanto a ti,
lentamente, se consume el cigarro
entre el carmín desgastado,
ante tu mirada serena
de marinero rubio
elijo la gloria de madrugada
beso tus labios inertes

Y no aprieto el gatillo
 27F-Beber para contarlo- .::Beber para contarlo::.
       BUKOWSKI CLUB                      

1 comentario:

  1. Luego subió ella y
    empezó a leer su jodido jazz
    y supe
    que Nueva Orleans se había mudado
    a su ombligo
    y que la ciclogénesis anunciada para esa noche,
    se hacía explosiva entre sus piernas

    que no distan tanto del cielo.

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gules